Coral nace para atender la necesidad surgida con la publicación de la Instrucción Ad resurgendum cum Christo acerca de la sepultura de los difuntos y la conservación de las cenizas en caso de cremación.

Junto al aumento de las incineraciones en los últimos años, recuperamos la tradición de situar los restos de los difuntos en el marco de los templos parroquiales. Un emplazamiento simbólico, dentro de la ciudad y muy próximo al hogar de los familiares, que facilita su proceso de duelo y de despedida.

Un espacio único, privilegiado y reconfortante que ayuda a recordar y a honrar la memoria de nuestro ser querido, y a mantener los fuertes vínculos emocionales y espirituales.

Nuestra misión es acompañar a las familias ante la pérdida de un ser querido ofreciéndoles tranquilidad y asesoramiento.

Nos encargamos de todo el proceso y trámites necesarios, así como la gestión de exhumaciones y traslado de las cenizas al columbario.

La ética, la integridad y la profesionalidad son la base de nuestro código deontológico. Actuamos siempre de forma honesta, veraz y con una actitud respetuosa y leal con las familias.